Desde cuando escribió su primer poema, a la tierna edad de seis
años, Daniel Samper Pizano ha sido coleccionista gomoso de lo
que llama «mala poesía buena». Es decir, aquella
poesía que, por coja, por cursi, por excesiva o por pretensiosa,
alcanza adorables dimensiones de horripilante calidad.
Samper
lleva muchos años preguntando, hurgando y leyendo en busca
de joyas del género. A veces las descubre en libros de grandes
poetas; a veces en publicaciones de personas ingenuas que se creen
dotadas para la poesía; a veces, incluso, en avisos callejeros.
Conversaciones con amigos, tertulias literarias, anécdotas
de café y recortes de prensa complementan constantemente su
arsenal.
Todo
ello le ha permitido acumular una deliciosa «loboteca»
repleta de poemas involuntariamente graciosos, de versos paródicos
escritos con toda la intención y de horrorosas rimas sentimentales.
A los anteriores agrega poemas construidos con insólitos juegos
de palabras.
Versos
chuecos ofrece una antología de la más gloriosa mala
poesía en lengua castellana. Son obras como la siguiente, de
un sacerdote español que intentó narrar el Evangelio
en verso:
Nuestro
Señor Jesucristo
nació en un pesebre.
¡Donde
menos se espera
salta la liebre!
Autor
de más de una veintena de libros de humor, novelas, cuentos,
y ensayos sobre literatura, periodismo y música popular, Daniel
Samper Pizano entrega en este volumen su más risueña
y preciada antología.